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Opinión: Acuerdo comercial con Mercosur

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¿Qué novedades ofrece el nuevo acuerdo? Además de otros sectores (textiles, confecciones, metalmecánica, plásticos, servicios y químicos), el acuerdo incluye el sector automotor. Foto: Revista Turbo

Lea la columna de opinión de nuestro editor Rubén González sobre el Acuerdo de Complementación Económica.

Con la entrada en vigencia del decreto 2111 del pasado 15 de diciembre de 2017, por medio del cual se implementa provisionalmente el Acuerdo de Complementación Económica (ACE) entre Colombia y Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay), que contempla la conformación de un área de libre comercio que involucra intercambios comerciales y la eliminación de restricciones arancelarias, las marcas de automóviles han actuado rápidamente para ampliar su oferta de nuevos modelos, así como ajustar las condiciones de los ya presentes, en especial de los vehículos procedentes de Brasil, con precios realmente atractivos para los usuarios.

¿Qué novedades ofrece el nuevo acuerdo? Además de otros sectores (textiles, confecciones, metalmecánica, plásticos, servicios y químicos), el acuerdo incluye el sector automotor,
en donde se han especificado una serie de cuotas anuales recíprocas de hasta 42.000 vehículos con Argentina y otros 50.000 con Brasil, lo que representa un potencial de 92.000 unidades para los próximos 4 años.

Esto significa que Colombia también puede exportar de manera escalonada a Argentina hasta 12.000 unidades de vehículos de carga y pasajeros, y hasta 30.000 unidades de
vehículos livianos. En el caso de Brasil, seguirá el mismo mecanismo y será de hasta 50.000 mil unidades a partir del tercer año (2020).

Estas cifras están distribuidas en cuotas que cada marca beneficiada podrá aprovechar para incrementar su portafolio, como es el caso de FCA, representada en Colombia por el grupo SK Bergé, que introdujo el nuevo Jeep Compass con un precio de $79.990.000 y mejoró la oferta del Renagade, que ahora se convierte en el modelo de entrada a la marca a un precio de $69.990.000.

Otra marca que actuó con rapidez fue la japonesa Honda, que también reformuló el precio del WR-V en $65.990.000, con lo que busca hacer mayor volumen de venta e incrementar su participación en el mercado de las SUV de entrada. De esta manera se espera que otras marcas hagan sus mejores ofertas.

El acuerdo, bien aprovechado, permitirá un giro favorable a la industria automotriz, tan golpeada por el incremento en los impuestos, específicamente por el IVA, y la devaluación del  peso.

REVISTA TURBO

 

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